Una receta para empezar este blog, algo muy sencillo y rico sobre todo en invierno.
Ingredientes
Un litro de agua
Media cabeza de ajos,
Aceite de oliva
Media cucharita de Pimentón dulce
Una pizca de sal
Cuatro huevos
Pan duro
En una cazuela echar un chorretón de aceite de oliva, sofreír el ajo pelado y cortado a trozos. Antes de que llegue a dorar el ajo se echa el pimentón dulce y una pizca de sal, se remueve rápidamente y se añade el agua natural. Cuando empiece a hervir añadimos el pan duro cortado a rebanas o dados y cuando vuelva a hervir dejar caer los huevos, apagar el fuego y dejar reposar.
Notas:
La cazuela mejor de barro.
Los ajos se pueden freír cortados enteros con un corte a mitad y piel. Luego al servir quitarla.
Se puede variar el grado de cocción del huevo según gustos, hay quien le gusta ligeramente pochado con la yema blanda y a otros más hecho.
Tienes razón en que es una pena que se estén perdiendo muchos de estos platos. Con lo buenas que están unas sopas de ajo así de sencillas. Mi madre, a veces, les ponía un sofrito de pimiento verde y bacalao desmenuzado en vez de los huevos y también estaban espectaculares.
ResponderEliminarmmm, para el invierno sabroso y facilísimo!!!
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